Cada uno de los elementos que componen un vehículo son importantes, pero los de más relevancia son los que están en permanente contacto con el suelo. La construcción de estos requiere de tecnología y conocimiento para poder brindar una correcta adherencia y fricción contra el pavimento, posibilitando un buen arranque, frenado, marcha y amortiguación.
La tecnología que se emplea para construir estas piezas nos hace pensar ya no queda lejos la mirada futurista y ecológica. Expertos en el tema se encuentran en constante investigación, innovación y construcción de nuevos materiales, creando de esta manera neumáticos sustentables para acompañar la descarbonización de la industria automotriz. A pesar de que es un proceso largo y complicado, en cuanto a su distribución mundial, no es una mirada lejana a lo que se aproxima en unos años.
Aunque los avances están cada vez más cerca de ser parte de la vida cotidiana, la fabricación de un neumático sigue realizándose de una manera no tan sencilla y con diversos puestos de producción. Durante el recorrido se podrá encontrar la presencia del caucho, poliéster, acero, dibujos hechos en profundidad, inflado, pruebas de rodado, entre otros componentes y etapas que permitirán obtener el sostén de cualquier transporte. Por ser una de las piezas indispensables es necesario conocerla en profundidad.
¿Cuáles son las partes de un neumático?
Para saber cómo se elaboran, primero se debe conocer los elementos necesarios que conforman un producto equilibrado, resistente, seguro y duradero. Se puede encontrar:
Banda de Rodadura: Es la más conocida por ser la que proporciona amortiguación, resistencia, adherencia, garantiza la maniobrabilidad y rendimiento durante su contacto con el suelo. Se la puede visualizar fácilmente, ya que es la banda de caucho exterior que cubre la carcasa. Sus diseños y compuestos pueden variar según el uso que le den al neumático.
Entalladura y estría: La misma banda anteriormente mencionada está separada por estrías profundas que permiten el paso del agua, nieve, barro, entre otros. Mientras que las entalladuras son hendiduras menores sobre la misma banda. Estas últimas le brinda una adherencia adicional, ideal para quienes van a conducir en zonas de nieve o hielo.
Flanco o Costado: Su finalidad es proteger la capa radial de las fricciones e impactos y aportar estabilidad lateral. Es aquí donde también se podrá hallar toda la información impresa de este elemento.
Hombro: Es el encargado de garantizar la trayectoria del vehículo durante las curvas, ya que es la transición entre la banda rodadura y los flancos. Además, se caracteriza por ser la capa de caucho más gruesa de todo el neumático.
Lona de carcasa: Se trata de una lona de fibra textil o de acero. Se encuentra situada en el interior del neumático y su función es aportar rigidez, permitiendo flexión en cualquier dirección.
Talones: Es la zona final del flanco, donde termina el neumático y se une con la llanta. El mismo está conformado por alambres de acero trenzado en forma circular, caucho y recubierto de capas de la carcasa. Su función es sujetar el neumático para evitar que se deslice en la llanta. El ajuste que tiene es perfecto para evitar que el aire se salga.
¡A rodar la producción!
Luego de conocer cada elemento que compone un neumático, es hora de saber sobre su proceso de producción. El mismo no se caracteriza por ser sencillo, al contrario, conlleva la unión de varios componentes que se logran obtener a partir de varias etapas y son finalmente ensamblados en máquinas. La elaboración consta de los siguientes pasos:
Mezclado
Este es el primer paso en la fabricación de un neumático. Aquí es común el uso de mezcladoras gigantes para trabajar la materia prima, ya que la misma puede estar compuesta hasta de 30 tipos distintos de caucho (natural o sintético), rellenos y otros ingredientes, como negro de humo, sílices, antioxidantes y plastificantes. Al integrar todos los materiales se obtiene como resultado un compuesto gomoso de color negro. El tipo y la cantidad de materia prima que se utilice dependerá principalmente de la parte del neumático que se busca producir.
No obstante, durante esta primera etapa es importante también la temperatura, la cual se eleva alcanzando aproximadamente los 170°C, para lograr una lámina homogénea o compuesto de caucho.
Calandrado
Durante el calandrado se realiza la elaboración de las telas de cuerpo, las cuales son unos tejidos textiles recubiertos de goma que tiene la función de conformar la estructura, y de soportar la carga del vehículo junto a la presión de aire interna.
En esta fase, las máquinas también son protagonistas porque el caucho del mezclado y una tela de poliéster ingresan para atravesar un proceso. La goma se presiona contra el poliéster y genera un rollo de tela engomada.
Después de tanto tiempo expuesto al calor, el caucho se enfría y el gran rollo pasa a las trituradoras donde se recortará en tiras que conformarán la estructura del neumático.
Extrusión
Este paso se hace con otros compuestos que surgieron de la primera parte del proceso con máquinas llamadas extrusoras. A diferencia de lo que se realizaba en el calandrado, aquí se busca desarrollar rollos o tiras de goma, con propiedades y formatos muy distintos. Tiempo más tarde, lo obtenido se emplea para ensamblar distintas partes del neumático, como sus paredes laterales, bandas de rodamiento o parte de los talones.
Aro de talón
En esta fase de la fabricación se conforma la pieza del neumático que mantiene contacto con las llantas. Para elaborarlo se utiliza alambre de acero que al enrollarlo toma la forma de un aro y junto a una goma, que se formó en la extrusión, da como resultado el tan conocido aro de talón.
Ensamblaje o Construcción
En esta instancia, se utilizan máquinas de alta complejidad para unificar los materiales producidos y se construye el neumático desde adentro y hacia afuera. De esta forma, se coloca, se corta y se unifican los elementos textiles, lonas con cables de acero, los talones, las bandas de rodadura, las lonas y demás. Todo este proceso se lleva a cabo para conformar un “neumático verde”, al que se le atribuye esta denominación porque se encuentra sin vulcanizar y con un aspecto que se asemeja cada vez más al producto final, solo que aún no está listo para utilizarse.
Vulcanización
En este punto, los neumáticos verdes son llevados a las prensas o máquinas de curado, donde se vulcanizan con moldes calientes, que sirven a su vez como contenedores, donde se comprimen todas sus partes. Aquí también se realizan los estampados, diseños y formas que representan la superficie exterior que ya se conoce. Claramente, cada tipo de neumático tendrá su propio molde según el modelo a fabricar.
Para la vulcanización es necesario recurrir nuevamente, no solo a las temperaturas altas, sino también a elevadas presiones durante unos 15 a 60 minutos dependiendo del tipo de producto. El caucho obtendrá finalmente la dureza, resistencia y estabilidad que se requiere para considerarse terminado, listo para ser distribuido y colocado en las llantas.
Control de calidad
Para terminar con la fabricación a un 100% e iniciar la comercialización se debe ver en detalle cada sección del producto. Esta tarea se encuentra adjudicada a los inspectores calificados en esta área, que emplean una variedad de elementos para realizar minuciosamente el control de calidad de cada uno de los neumáticos y detectar así hasta la más mínima imperfección de ser necesario. El objetivo es garantizar los estándares de seguridad y el rendimiento para otorgarle a los conductores una buena experiencia.
Además, puede ocurrir que, del proceso de elaboración, se extraiga una muestra del material de los neumáticos para que sea sometido a una prueba de rayos x. Otra de las actividades recurrentes en esta fase son los ensayos donde, a través de una maquinaria de alta precisión, los neumáticos son inflados y sometidos a fuerzas que simulan su uso en un vehículo. Esto último sirve para asegurarse de que brinden un buen balanceo y ruedo confortable, sin la presencia de vibraciones.
Finalmente, cuando todas las piezas fueron revisadas e inspeccionadas, se envían al almacén para su distribución.
Vale aclarar que cada fase individual de la fabricación, desde la inspección de las materias primas hasta la entrega del producto terminado, se somete a un control de calidad y seguridad continuo.
El futuro es un “Neumático Verde”
En un comienzo el Hevea Brasiliensis, también conocido como el árbol de caucho, era el principal ingrediente de una mezcla de compuestos orgánicos que se utilizaban para formar un látex que conformaría el caucho natural. A pesar de sus grandes plantaciones en el suroeste de Asia, cuando la demanda fue tan alta, y su tala como explotación forestal no tenían límites, se decidió reemplazarlo por el caucho sintético, elemento que se emplea actualmente. En la actualidad, el mundo enfrenta el problema del cambio climático, y la industria automotriz busca ayudar a limpiar el planeta creando un neumático sustentable, un neumático sintético verde.
Por el momento, se están desarrollando compuestos químicos que dejen de lado el uso de petróleo para la elaboración de estas piezas, empezando a reducir la contaminación también en varios puntos de la fabricación. Al mismo tiempo, se busca producir cauchos más durables que generen la menor cantidad de producción y recambio por parte de los consumidores.
Mientras tanto, marcas internacionales ya proyectan posibles fechas como metas para los inicios de fabricación o venta de neumáticos completamente verdes. Entre las promesas se encuentran cauchos 100% reciclados y reciclables, neumáticos integrados a la llanta, bandas de rodaduras impresas en 3D, poliéster fabricado a partir de botellas de plástico recicladas y neumáticos elaborados a base de aceite de soja. Este último permitiría reducir el uso de aceites a base de petróleo hasta en 83 millones de litros por año.
En algunos países, como Japón, ya se está produciendo, desde hace un tiempo, un caucho natural desarrollado a partir de fibras de plantas y silicio. En paralelo, una de las empresas más reconocidas de Italia, recibió un certificado en reconocimiento al respeto del medio ambiente por la materia prima que emplean para su fabricación. Se trata de un neumático de caucho natural y rayón que, para la obtención de los elementos naturales, la empresa dice estar comprometida con la mejora de los cultivos de caucho preservando los bosques.
Por otro lado, los alemanes, adelantados a su tiempo, ya presentaron un tipo de neumático hecho de caucho natural conformado por: Taraxacum o dientes de león (una planta perenne), silicato de cenizas de la cáscara de arroz, aceites y resinas. Estos componentes naturales equivalen a un 35% del neumático, mientras que el 17% proviene de materiales reciclados como aceros, caucho de neumáticos usados y el negro de carbono recuperado. Lo más destacado de este producto es que representa el primer uso de poliéster elaborado a partir de botellas de plástico recicladas. Según informan los responsables de esta fabricación, el poliéster no solo se utilizará en la cubierta del neumático, sino que también para la creación de un juego de cuatro neumáticos. Se calcula que se pueden reciclar alrededor de unas 60 botellas, lo que aportaría una gran ayuda al medio ambiente para reducir la contaminación de plásticos.
A pesar de que ya pasaron muchos años de cuando se utilizó por primera vez una goma natural para cubrir ruedas de madera o de acero, y más de 180 años para el descubrimiento de la vulcanización, los avances no tienen mira de terminar. La industria automotriz poco a poco va empezando a integrar formas o elementos más ecológicos para enfocarse en un mundo cada vez más limpio. Si bien los neumáticos son uno de los mayores desafíos para trabajar en su producción, también lo son otras partes del vehículo, como el uso de combustible, plásticos y tapizados. No obstante, queda garantizado que se puede acceder a más información sobre los procesos de fabricación y sobre los nuevos consumos ecológicos. Siempre recuerda que a la hora de adquirir un vehículo usado, puedes hacerlo con tranquilidad en Kavak, que te garantiza el buen estado de los neumáticos de tu nuevo vehículo así como el correcto funcionamiento del mismo.